En esta entrada, quiero tocar un tema importante que puede tener un impacto significativo en la vida de nuestros hij@s: liberarnos de las cosas que pueden estar interfiriendo con su crecimiento y desarrollo.
Cuando escribí Crónicas Cuánticas, Maryon y el péndulo de cristal, quise brindarle al lector la oportunidad de aprender cómo liberar la mente de las limitaciones y abrirse a nuevas posibilidades, y este concepto también puede aplicarse en nuestro hogar. Aquí tienes tres cosas que debemos eliminar o minimizar para potenciar una vida plena. Recuerda que si el vaso está lleno, no podremos incorporar nuevas ideas.
1. El Exceso de juguetes materiales
Nuestr@s hij@s suelen recibir una gran cantidad de juguetes a lo largo de los años. En sus cumpleaños, en navidades… y también en otras épocas como el final del curso escolar.
Ten en cuenta que a veces, menos es más. El exceso de juguetes puede abrumar a los niños, distraerlos de otras actividades creativas y exploratorias, y lo que es peor, que no aprendan el valor de las cosas y piensen que pueden conseguir todo lo que deseen con poco o nada de esfuerzo.
Como padres y madres siempre queremos darle lo mejor a nuestros peques, y soñamos con darles todo aquello que nosotros, por la razón que fuese, no hemos tenido. Pero considera también que crecer con la mentalidad de «me dan todo lo que pido», les llevará a pensar que nunca tendrán que esforzarse y nada está más lejos de la realidad.
Todo en la vida requiere un esfuerzo, y muchas veces, sacrificios. Enséñale que en la vida debemos trabajar para conseguir nuestros sueños. Si no lo haces, cuando crezcan serán adultos incapaces de lograr nada por sí mismos y no resistirán la frustración cuando tengan su primer tropiezo.
Con esto no quiero decir que no puedas hacerles regalos, está claro que sí. Es parte de su ilusión de ser niñ@s. Pero enséñale que deben ganarse sus recompensas. Que reconozcan el valor de las cosas, que sepan lo que tú te esfuerzas para poder dárselas.
Contempla de vez en cuando hacer una limpieza de juguetes con tus hij@s y donar aquellos que ya no utilizan. Esto les enseñará sobre la gratitud y la generosidad, y también les dará más espacio para la creatividad y hacer otras actividades.
2. Pantallas en Exceso
Vivimos en una era digital y las pantallas son una parte inevitable de la vida de nuestros hijos. Sin embargo, el tiempo excesivo frente a las pantallas puede limitar su imaginación y creatividad. Establece límites de tiempo para el uso de dispositivos electrónicos y anímales a explorar el mundo real a través de la lectura, el juego al aire libre y la interacción cara a cara.
Un buen uso de los dispositivos digitales puede enriquecerlos y entretenerlos mucho, pero el exceso y el abuso de contenidos inadecuados, violentos o sin supervisión, puede traer complicaciones y riesgos. El secreto está en equilibrar los contenidos digitales con otras actividades como la literatura, el deporte y el contacto con la naturaleza.
3. Expectativas Excesivas
A veces, como padres, podemos tener expectativas poco realistas sobre nuestr@s hij@s, lo que puede ejercer una presión innecesaria sobre ell@s. Permíteles ser ellos mismos y explorar sus propios intereses y pasiones. Fomenta un ambiente donde puedan cometer errores y aprender de ellos, sin el miedo al juicio. Dale la oportunidad de elegir.
Al liberar nuestro hogar de estas cargas innecesarias, estamos abriendo espacio para que nuestros peques exploren su creatividad, imaginen mundos nuevos y se desarrollen de manera integral. Recuerda que estos pequeños cambios en nuestro entorno pueden marcar una gran diferencia en el camino de nuestr@s hij@s hacia un futuro brillante.
No dudes en compartir tus pensamientos y experiencias en las redes sociales. Estoy ansiosa por escuchar cómo estás aplicando estos consejos en tu hogar.