¿Bombilla o Rayo Láser?

Cuando me preguntan qué es lo que considero más importante para alcanzar una meta o superar cualquier desafío, siempre respondo lo mismo: lo principal es el enfoque.

En esta era de exceso de información, uno de los problemas más grandes que sufren los niños (y también los adultos) es la falta de atención.

Y es muy difícil superar los desafíos si estamos distraídos y no concentramos nuestra energía en un solo punto, es decir, si no enfocamos nuestros pensamientos en aquello que queremos lograr.

Cosa que considero imprescindible para alcanzar cualquier objetivo, por muy pequeño que sea… Desde cepillarnos los dientes de forma eficiente cada mañana, hasta superar un examen, ganar el partido de fútbol, conseguir un empleo, bajar de peso o llegar a fin de mes.

Por eso, cada vez que tengo la oportunidad de dirigirme a los peques, en alguna visita colegial o evento literario, les pregunto: ¿quieres ser bombilla o rayo láser?

Y les explico…

La potencia de una bombilla de sesenta vatios puede iluminar un recinto, pero su energía está dispersa. Si colocamos esa misma potencia dentro de un sistema láser, cuya tecnología concentra la energía en un solo punto, es capaz de cortar el acero.

Está claro… ¿verdad?

Allí radica la importancia del enfoque.

Cómo enseñarles a concentrarse en sus metas y reducir las distracciones es tema para otra newsletter…

Pero comprender que la fórmula para criar hijos exitosos, no es cosa del azar ni del destino, sino que comienza por enseñarles desde pequeños los hábitos que conducen al éxito, es fundamental.

Y si lo deseas, te acompaño en el proceso.

En mis redes publico toda clase de contenido para ayudarte a forjar cerebros de rayo láser, y que desarrollen todo su potencial interior.

¿Nos vemos dentro?

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Te abrazo infinito.

Audrey